SALKANTAY
PATAGONIA
"En agosto 2022, antes de que las lluvias entraran al valle del Nevado Salkantay, Gabo Benoit (@gabobenoit) se embarcó en un desafío en mountain bike siguiendo el curso del agua, un elemento que le da forma al territorio y modela el habitar de las culturas. Junto al fotógrafo Diego del Río (@delriosudiego) y a @peruvianmountainrides ascendieron desde Soraypampa, entre pedaleo y caminata, hacia el Paso Salkatay —a los 4.600 metros— desde donde descendieron de vuelta a la ciudad de Santa Teresa, todo en un solo día.
La ruta que vigila este apu, montaña icónica para los Inca, los llevó por terrenos alpinos cerca del glaciar, pampas y selva. En cada ambiente, el agua fue protagonista. “A pesar de su fragilidad, este glaciar sigue siendo fundamental para la vida en todo el ecosistema. Al comenzar el descenso pueden verse claramente los efectos del cambio climático, con desprendimientos de enormes bloques de hielo. Pero cuando entras a la selva alta, aparecen cursos de agua por todas partes y te das cuenta de que ese glaciar ha ido irrigando todo hacia abajo, nutriendo al suelo y generando todo ese verdor impresionante. El cambio en el paisaje es brutal”.
Para Gabo, un pescador y ciclista de montaña que pasa gran parte de su tiempo entre los ríos de la Patagonia, este viaje fue un ejercicio para reconectar con el agua en sus diferentes estados y volver a pensar en cómo nuestras acciones repercuten en el entorno. “En algunas partes del valle el agua sigue corriendo como lo hacía hace más de 1000 años”, dice Gabo, “los senderos están construidos siguiendo su curso porque era sagrada para las comunidades ancestrales”. Hoy en día el ser humano sigue siendo responsable de su cohabitar con el agua y de acelerar o frenar el avance de la crisis climática. Es hora de que reconstruyamos esa relación." - publicación en @patagonichile
























